Puede que nadie imaginase la magnitud de las inundaciones de Valencia, pero la realidad es que, con los avisos por DANA, se sabía que venía algo grande. Por eso, en esas situaciones es muy importante comenzar a tomar precauciones antes de que se produzca la inundación. Hay algunas medidas que quizás sean excesivas si finalmente no hay tanta agua, pero vienen muy bien si se cumplen las peores sospechas.
La más básica, por supuesto, es no salir a la calle. También se debe tener un plan de evacuación para buscar un terreno elevado, ya sea un piso más alto en un mismo edificio o alguna estancia en una parte elevada de la ciudad. Ante todo, ese lugar debe estar alejado de ríos o playas.
Hecho esto, se deben seguir tomando medidas, tanto antes como durante y después de las inundaciones. Vamos a ver algunas de las más recomendadas por los servicios de emergencia de todos los países. Y es que el agua no entiende de nacionalidades. Si bien en España no estamos tan acostumbrados a estas situaciones, las medidas de Estados Unidos, por ejemplo, son igual de eficaces si se producen inundaciones.
¿Qué debes hacer antes de las inundaciones?
Una vez preparado el plan de evacuación, debemos valorar cómo van a afectar a nuestra vivienda las inundaciones.
Si tenemos jardín, las mesas, sillas o cualquier otro objeto se deben introducir en la vivienda o, al menos, atarlos para que no se vayan con la corriente. También es importante hacer fotos detalladas de las pertenencias en la vivienda. Estas pueden ser útiles en caso de búsqueda o reclamaciones al seguro (siempre que se haya contratado uno que lo cubra).
También se deben desenchufar los aparatos eléctricos. Es importante hacerlo, pero si se nos olvida no debemos tocarlos una vez que ya estén cubiertos de agua. Igual que nosotros debemos buscar un lugar alto, también es aconsejable hacerlo con objetos delicados. Solo si da tiempo antes de que lleguen las lluvias, por supuesto. Si no hay tiempo, la prioridad siempre será salvarnos nosotros.
Se deben poner los alimentos que haya en casa lo más alejado posible del suelo. Así, con suerte, no serán alcanzados por el agua. Pero, si finalmente lo hacen, por poca agua que les haya salpicado, es mejor tirarlos. Puede que estén contaminados y su consumo nos cause una intoxicación alimentaria.
Por supuesto, también es importante tener las puertas y ventanas cerradas para evitar que entre una tromba de agua cuando lleguen las inundaciones.
No olvides tu kit de emergencia para inundaciones
Si nos vamos a un refugio debemos llevar con nosotros un kit de emergencia. Este incluye suficiente agua, alimentos no perecederos que no necesiten cocción y herramientas como abrelatas, linternas, pilas y baterías extra para el móvil. También se deben llevar los medicamentos que tenga recetados cada persona refugiada, además de artículos de higiene personal y otros medicamentos para situaciones concretas, como analgésicos o antiinflamatorios.
No debemos olvidar a las mascotas. Es importante llevar con nosotros tanto su comida como la correa, transportín o cualquier otro elemento que necesitemos en caso de que nos acompañen en una evacuación.
Los documentos importantes, como la póliza de seguros, la información médica o los registros de cuentas bancarias también son importantes si no se pueden obtener online. Afortunadamente, hoy en día con internet se puede obtener casi todo. Finalmente, cerramos el kit de emergencia con un botiquín de primeros auxilios.
¿Y después qué?
Si a pesar de todas las medidas de precaución hay que evacuar, solo se debe llevar lo imprescindible. De nuevo hay que recordar que nuestra vida y la de nuestros seres queridos está por encima de cualquier objeto.
Si estamos en un lugar alto, alejados del agua que va subiendo, debemos mantener la calma e informar a los servicios de emergencia. A su vez, nos debemos informar nosotros de cómo van avanzando las alertas. Así, tendremos constancia sobre el mejor momento para abandonar el refugio.
Según la magnitud de las inundaciones, puede que haya pocos daños y que podamos solucionarlo rápidamente, o que tengamos que evacuar la casa hasta que se reconstruya o vuelva a ser un lugar salubre en el que vivir.
Todo depende de la magnitud de la situación. Lo que está claro es que, si se nos acerca una DANA, debemos estar atentos a las alertas por si fuese necesario prepararse. En este caso, ya había alertas, pero puede que no se les hiciese suficiente caso.