El Samsung Watch Ultra se postula como el smartwatch más completo de todos los disponibles dentro del ecosistema Android. Y razones no le faltan. Una hoja de especificaciones sobresaliente acompañado de un software que, con el sello de Samsung, ofrece un mix de funcionalidades y diseño bastante atractivo. Salta a la vista cuál es la inspiración directa del Ultra, que por cierto lleva el mismo nombre, tanto en funcionalidades como en algunas decisiones de diseño. Dejando esto de lado, estamos ante un dispositivo muy recomendable para acompañar a cualquier smartphone Android, y específicamente, a sacarle totalmente el partido al ecosistema de Samsung.
A simple vista, puede parecer un dispositivo Android Wear más. Pero lo cierto es que la inclusión de funcionalidades exclusivas de Samsung. Unido a lo bien pensada que está la aplicación de Salud de la compañía coreana hacen del Ultra uno de los mejores dispositivos para medir y llevar un control de salud, independientemente que busques practicar o no deportes extremos.
Un debate, este último, que estaremos de acuerdo en que está totalmente superado. Es la combinación de diseño y funcionalidad lo que hacen de este Ultra un dispositivo genial, y cuya mayor barrera y carta de presentación es un tamaño enorme que deja huérfanos a todos aquellos usuarios que busquen algo más comedido pero igual de potente.
Su tamaño es su mayor fortaleza. También su mayor flaqueza
Porque lo primero que llama la atención del reloj Ultra de Samsung es su tamaño. La compañía mantiene un diseño redondo, pero su caja da el salto de los 44 mm del Watch más grande a los enormes 47 mm. Puede parecer poco, pero en la muñeca se siente especialmente grande, sobre todo a la hora de llevar a cabo ciertas actividades deportivas u otras más mundanas como dormir. Aquí el primer aviso a navegante, si no te gustan los relojes grandes, ya puedes irte olvidando del Ultra.
El aumento del tamaño también tiene dos consecuencias: el reloj es más grueso y más pesado. En concreto, 47.4 x 47.4 x 12.1 mm y 60.5 g, aunque la sensación respecto al peso en el día a día pasa bastante inadvertida en comparación con otros relojes más pequeños y ligeros como el Apple Watch. No obstante, el tamaño no pasa tan desapercibido, y se nota especialmente en los primeros días si vienes de un reloj más pequeño. A este respecto, poco más que decir. El tamaño del Ultra lo amarás o lo odiarás, pero la buena noticia es que será algo que suceda el primer día.
Si no te importa el tamaño, te vas a encontrar un dispositivo genial en casi todas sus características, a menos las que no tiene relación directa con Android Wear, quizás su mayor, pero si vienes de otros ecosistemas. Y es que por muchas actualizaciones que reciba el sistema operativo de Google y aun con el formidable trabajo de Samsung con su One UI Watch, sigue siendo un paso atrás respecto al más limitado watchOS o, incluso, del antiguo Tizen de Samsung.
Cosas simples como realizar pequeñas acciones requieren más pasos de los necesarios, y lo cierto es que hay algunas opciones del sistema, como el propio centro de control y o de notificaciones que necesitan un buen repaso. El Ultra de Samsung soluciona parte de esa problemática de tener que navegar por varios menús a la hora de realizar alguna acción con la inclusión de un botón de acción personalizable. Permite hacer acciones rápidas como arrancar entrenamientos con un toque o abrir ciertas funciones, y está colocado entre los dos botones principales, únicos métodos de entrada junto a la pantalla táctil, ya que el Ultra no cuenta con ningún tipo de corona o con botones extra.
Esta pantalla táctil del tipo full-color AMOLED con cristal de zafiro, y de un tamaño bastante generoso que se queda en 1.5 pulgadas, es la protagonista del Ultra. El brillo y la calidad de la misma son sobresalientes, e incluso con actividad deportiva a plena luz del día se ve de maravilla. Es del tipo siempre encendido, aunque el sistema permite desactivar esta función directamente desde el centro de control. Incluye un modo noche, de nuevo, idéntico al del Ultra de Apple, que cambia el color de la esfera principal a luz roja de la que no deslumbra. Es una función opcional, y lo cierto es que, por la noche, a la hora de dormir, sigue siendo preferible desactivar el modo siempre encendido que este modo nocturno.
Sobre las opciones de personalización, la app de Samsung permite elegir entre muchas esferas diferentes, y como siempre, las diferentes complicaciones pueden elegirse de entre las apps instaladas en el reloj y entre las muchas funcionalidades de salud disponibles. Nada novedoso en este aspecto que cualquier usuario de reloj o pulsera inteligente no conozca hasta la saciedad.
La pantalla está encastrada en una caja de titanio de 47 mm, bastante resistente, y que lo hace ideal para su uso en situaciones más extremas que las de los relojes inteligentes tradiciones, incluso de los recientes Galaxy Watch6 de aluminio. Esto se traduce en una resistencia al agua de 10 ATM en lugar de los tradicionales 5 ATM. Rematan las especificaciones, la certificación IP68, MIL-STD-810H y su capacidad para funcionar sin problemas hasta 55 °C de calor y 9.000 m de altitud.
Integración total de la medición de la actividad física y salud
El punto más interesante del Ultra, como de la mayoría de los smartwatches, es la medición de la salud. Hemos encontrado al Ultra de Samsung bastante preciso a este respecto, incluso comparado en tiempo real con el Watch de Apple en ciertas actividades. No obstante, hay lagunas funciones que son bastante superiores en el Samsung. No tanto del propio Ultra, como del software de Samsung. La app de la compañía es muy completa, y que el reloj permita monitorizar el sueño, sin rutinas y ni opciones raras, o mantener la monitorización del pulso cardíaco de forma constante durante todo el día, es todo un puntazo.
Puede ser normal para muchos usuarios de relojes inteligente, para los usuarios que vengan de uno de los modelos de Apple es un mundo aparte. Además, la integración con la dieta, funcionalidades para medir la composición corporal (con todas sus inexactitudes) y la compatibilidad con todo tipo de dispositivos extras como básculas, hacen del Ultra de Samsung un dispositivo muy recomendable si buscas cuidar al máximo tu salud.
Otras opciones, como la posibilidad de crear tus propias rutinas de entrenamiento, incluyendo fuerza, tener una medición de los descansos o el estrés y poder acceder a todo ello sin recurrir a aplicaciones de terceros, son algunas de esas cosas en las que se nota que Samsung ha puesto especialmente cariño en la vigilancia de la actividad física y la salud personal. Y sobre todo, en tener toda la información en un mismo lugar, tanto en la app de Salud de Samsung como directamente en las complicaciones del Ultra.
Si eres, además, de los que le gusta estar monitorizando la actividad de forma constante, la batería del Samsung Galaxy Watch Ultra es bastante generosa. Sobre el papel, unas 100 horas de uso, aunque el dato interesante es que, fuera de los relojes exclusivamente deportivos, es de los pocos smartwatches puros que te permitirá evitar la carga diaria, y con par de veces a la semana será más que suficiente para un uso normal. Lógicamente, dependerá mucho de tus condiciones personales, de la utilización específicamente deportivo y del brillo de la pantalla, o de si usas el reloj con la medición del pulso constante en segundo en plano o no. En cualquiera de las situaciones, tiene 3 días de batería garantizados, al menos en nuestra experiencia. Más allá de eso dependerá mucho, como decimos, de uso que hagas del reloj, aunque es compatible con la carga rápida de 10 W (Qi).
Samsung Galaxy Watch Ultra, ¿merece la pena?
Tanto por especificaciones como por experiencia de uso, el Samsung Galaxy Watch Ultra es sin duda la mejor alternativa, a día de hoy, si eres usuario de Samsung o llevas un Android en el bolsillo. Su única pega, implícitas en la palabra Ultra, es que es grande, muy grande. Y eso deja fuera a muchas muñecas que verán en su enorme caja de titanio de 47 mm un dispositivo a evitar.
Su lista de especificaciones no tiene rival en el sistema operativo de Google, y a eso le añadimos su integración con los terminales Samsung y su ecosistema nos deja pocas excusas para no recomendarlo. Más allá de las funciones básicas de un reloj inteligente que ya damos por sentadas, su pantalla, su diseño y los fluidos de su potente procesador Penta-Core hacen del Ultra una experiencia exquisita en la experiencia diaria.
Además, su batería, muy por encima de la media, te garantiza no tener que cargar el reloj en el día a día. Y fuera de los relojes puramente deportivos, no vas a encontrar un smartwatch de gama alta con la autonomía de Ultra. Todo ello, unido a lo bien que funcionan sus, funciones de monitorización de salud, lo bien integradas que quedan todas las métricas en una misma aplicación, y las posibilidades de usar la IA de Samsung para tener recomendaciones deportivas personalizadas, hacen del reloj, como decimos, la opción más recomendable, no solo del catálogo de Samsung, de todo el ecosistema Android.