Motorola es una de esas muchas marcas icónicas que han perdido reconocimiento a causa de la llegada de compañías como Xiaomi, pero que aun así, pese a su olvido, siguen lanzando productos muy interesantes. Prueba de ello es el Motorola Edge 50 Neo que la compañía presentó hace escasas semanas, y que en Hipertextual hemos podido probar en profundidad. 

El Motorola Edge 50 Neo forma parte de la familia de móviles de gama media / alta de Motorola, que se centran principalmente en la cámara. Es, de hecho, el modelo más económico de los tres que tiene la marca actualmente en esta gama. Está disponible por 500 euros y lo cierto es que incluye características que pueden convertirlo en un muy buen rival de los móviles Xiaomi. 

El smartphone de Motorola, en concreto, cuenta con un diseño cuidado, una cámara destaca por su teleobjetivo y que no solemos ver en la gama media, y una pantalla que, por sus especificaciones, no deja indiferente a nadie. Pero, ¿son estas tres bazas suficientes para hacerse un hueco en la gama media? Y lo que es más importante, ¿puede este Motorola Edge 50 Neo luchar con la competencia que tiene en su propia casa? 

Un diseño cuidado y una pantalla a la altura

Trasera del Motorola Edge 50 Neo

Con Motorola me pasa un poco como Google. El diseño de sus móviles me gusta, porque son muy diferentes a los que vemos en otros móviles. En este caso, el Motorola Edge 50 Neo llama la atención por los acabados de su trasera, pues la compañía apuesta por colores Pantone y texturas diferentes al clásico plástico o cristal que incluyen la mayoría de móviles. 

En este caso, el modelo que estamos probando en este medio tiene una trasera de piel vegana, y es el color Lattè. Personalmente, no es mi favorito de todos los disponibles en este smartphone; aunque lo cierto es que es muy elegante. Es una especie de beige que combina muy bien con unos marcos de aluminio en un tono dorado brillante. Motorola, además, ha colocado diferentes elementos, como un anillo que rodea las cámaras, también en este acabado para darle una estética más, digamos, premium —aunque le falla, eso sí, la marca de Pantone en la parte inferior de la trasera—.

Además de bonito, el Motorola Edge 50 Neo es muy cómodo. Tiene unas dimensiones comedidas, un peso de tan solo 171 gramos y un grosor de 8,1 mm. 

Por otro lado, su pantalla es excelente por muchos aspectos. Es completamente plana, y cuenta con marcos muy delgados. Se trata de un panel pOLED de 6,4 pulgadas con una resolución Full HD+ y una tasa de refresco de 120 Hz. Es, también, una pantalla muy brillante (con hasta 3.000 nits cuando se reproduce contenido en HDR), y destaca tanto por su nitidez como por su buen contraste, así como por su buena interpretación de los colores. Colores que, por cierto, se pueden calibrar ligeramente en los ajustes del sistema. Es decir, podemos escoger entre tonalidades más intensas, más frías, etc.

Rendimiento y autonomía a la altura, con algún “pero”

Motorola Edge 50 Neo

Si bien es cierto que el rendimiento no es lo más destacado este Motorola Edge 50 Neo, este no deja indiferente a nadie. El terminal está equipado con un procesador Dimensity 7300, un chip construido en 4 nanómetros que ya hemos visto, incluso, en otros modelos de la marca, como su plegable más económico; el Razr 50. Está acompañado con 12 GB de RAM que permiten que todo se mueva con total fluidez. Incluso, es capaz de correr juegos con gráficos elevados sin ningún problema. 

Ahora bien, por algún motivo desconocido, es común encontrarse alguna que otra ralentización en las animaciones y lag puntual que si bien no impide un correcto uso, si lastra ligeramente la experiencia de una capa de personalización que destaca por ser limpia, con un aspecto muy similar a Android puro y que incluye funciones justas, pero muy útiles.

Este buen rendimiento se complementa con una batería de 4310 mAh que, lo cierto, cumple perfectamente incluso con un uso intensivo, pudiendo llegar al final del día sin ningún problema, en parte, gracias a la buena eficiencia del procesador. El Motorola Edge 50 Neo, además, es compatible con una carga rápida de 68W. Eso sí, el cargador no viene incluido en la caja. 

Las cámaras del Motorola Edge 50 Neo

Motorola Edge 50 Neo

Es, sin duda, uno de los puntos más importantes de este Edge 50 Neo: principalmente por la extraña configuración de cámara que incluye este dispositivo. Extraña, porque non estamos acostumbrados a ver este tipo de sensores en un móvil de gama media / alta. 

El Motorola Edge 50 Neo, en concreto, cuenta con un sensor primario de 50 megapixeles. También tiene una cámara ultra gran angular de 13 megapixeles, así como un teleobjetivo de 10 megapixeles capaz de tomar fotografías con un zoom óptico de 3x. 

La cámara del Edge 50 Neo es buena. El sensor principal consigue resultados prácticamente excelentes en cualquier condición, con muy buen detalle y una exposición más que correcta. El procesado, eso sí, a veces no funciona como debería y tiende a —digamos— sobresaturar demasiado la imagen, algo que obliga a repetir la toma. Se nota, sobre todo, en los verdes y luz azules.

Los resultados con el sensor ultra gran angular también son muy buenos aunque, como es habitual, tiende a perder detalle en interiores o en condiciones de baja luz. El teleobjetivo, por su parte, hace un genial trabajo cuando hay buena luminosidad, con un muy buen detalle y ese buen procesado que vemos con el resto de cámaras. 

Eso sí, sucede algo similar a lo que se percibe al navegar por el sistema: hay mucha ralentización, por ejemplo, a la hora de cambiar entre las diferentes cámaras.

¿Merece la pena el Motorola Edge 50 Neo?

Motorola Edge 50 Neo frontal

No hay duda de que el Motorola Edge 50 Neo, disponible por 500 euros, es una buena opción si buscas un móvil de gama media con un diseño cuidado, un rendimiento notable, una pantalla muy buena y una autonomía más que suficiente. También, si priorizas versatilidad en la cámara.

El teleobjetivo hace que la experiencia a la hora de sacar fotografías con este smartphone sea muy diferente a la de cualquier otro móvil de gama media, y eso, se agradece. Creo, sin embargo, que Motorola tendría que mejorar su procesado, sobre todo a la hora de interpretar esos tonos azules tan artificiales y esos verdes casi nucleares. Ojo, los resultados no son malos, sino que están, para mi gusto, lejos de la realidad.

Además, el Motorola Edge 50 Neo tiene un pequeño problema: tiene competencia en su propia casa. Su hermano mayor, el Edge 50 (ahora 550 euros), puede resultar una opción más atractiva para aquellos que busquen una pantalla más grande, una mayor batería y un procesador Qualcomm ligeramente superior en cuanto a rendimiento.

Por tanto, lo más recomendable es, o, por un lado, esperar a que este Edge 50 Neo baje de precio para que sea aún una opción más interesante o, por otro, apostar por su hermano mayor y sus especificaciones extra.