La influencer brasileña Fernanda Carolina ha muerto en París, donde vivía desde hace 6 años, tras sufrir un atropello cuando salió a correr. Es una noticia triste y aún más dramática por la forma en la que su marido supo la noticia: a través de un mensaje procedente del smartwatch de Fernanda.
La mujer, de 31 años, tenía activado el sistema de detección de accidentes de su smartwatch. Por eso, tras el atropello, su marido recibió este mensaje: “Fernanda ha tenido un accidente y tú eres el contacto de emergencia”. El hombre llamó inmediatamente a su esposa, pero esta no contestaba, así que acudió al lugar que le indicaba el reloj. Al llegar, la encontró tirada en el suelo mientras los servicios de emergencia intentaban salvar su vida. Lamentablemente no lo consiguieron.
El caso de Fernanda Carolina ha tenido un triste final. Sin embargo, este sistema de los iPhones y smartwatches más modernos ha salvado la vida de muchas personas al avisar a los servicios de emergencia rápidamente, nada más producirse el accidente.
¿Cómo funciona el sistema de detección de accidentes del Smartwatch?
Este sistema de detección de accidentes se puede activar en iPhone 14 o posterior (todos los modelos) con iOS 16 o posterior. Con respecto a los relojes, está disponible en Apple Watch Series 8 o posterior, Apple Watch SE (segunda generación) y Apple Watch Ultra o posterior con watchOS 9 o posterior.
Poco a poco otras marchas van incluyendo sistemas parecidos, aunque este fue el primero y más completo.
Funciona gracias a una serie de sensores, entre los que destacan un acelerómetro y un giroscopio. El primero, como su propio nombre indica, mide la aceleración, por lo que si detecta cambios súbitos en la misma puede determinar que se ha producido un accidente. Por otro lado, el giroscopio mide la velocidad de rotación, por lo que también puede lanzar la voz de alarma si se producen tumbos. A todo esto se suma la grabación del sonido ambiente del micrófono del teléfono o el smartwatch.
Cuando todos los factores apuntan a un accidente, lo primero que hace el dispositivo es indicar al accidentado que deslice la pantalla para llamar a los sistemas de emergencia. Si en 20 segundos no hay respuesta, porque esté inconsciente o inmóvil, se da igualmente un aviso a dichos servicios y se les envía la ubicación.
Además, si el usuario ha dejado un contacto de emergencia, como en el caso de Fernanda Carolina, este también recibe un mensaje. Así fue como su marido supo exactamente el lugar al que tenía que ir tras el impacto.
Otros casos más allá de Fernanda Carolina
El caso de Fernanda Carolina ha sido especialmente sonado por ser un personaje público. Sin embargo, los servicios de emergencia de todo el mundo reciben muy habitualmente avisos de estos dispositivos de Apple.
Y no solo ocurre en caso de atropellos. También puede ocurrir por un accidente de coche, una caída en casa o incluso una parada cardiorrespiratoria. No olvidemos que el smartwatch también puede medir el ritmo cardíaco, de modo que activaría la llamada en caso de que el corazón del usuario se detuviese o sufriese una alteración grande del ritmo.
Es, por ejemplo, el caso de la neoyorkina Jessie Malone, una mujer de 35 años que recibió un aviso de emergencia de su propio smartwatch mientras paseaba tranquilamente en bicicleta. El reloj había detectado un latido irregular que no se correspondía con lo normal durante la práctica de ejercicio. En el mensaje la instaba a buscar ayuda médica urgente, así que la mujer obedeció. Las pruebas en el hospital mostraron una enfermedad cardíaca que no sabía que padecía. Gracias a ello pudo recibir tratamiento a tiempo.
Otro estadounidense, Nolan Abell, perdió el control de su coche y se estrelló contra un poste telefónico. No llegó a perder el conocimiento, pero se sentía aturdido, sin capacidad para hablar. Así estaba, intentando mantenerse despierto, cuando a los pocos segundos del accidente su reloj vibró y escuchó una voz que le preguntaba si estaba bien. Al ver que no respondía a las indicaciones de la pantalla, el smartwatch llamó directamente a los servicios de emergencia, que acudieron a la ubicación indicada y pudieron salvar su vida. Si hubiesen llegado más tarde, quizás no habría podido contarlo.
Como Jessie y Nolan, hay muchísimos casos en los que el final sí fue feliz. Lamentablemente, las heridas de Fernanda Carolina no eran compatibles con la vida. Ahora, sus familiares piden que sus seguidores la recuerden como la gran persona que era. Ojalá su historia hubiese tenido un final diferente.