El coche barato de Tesla –también bautizado a menudo como Model 2– lleva años siendo el epicentro de noticias, filtraciones y rumores. La empresa norteamericana es la referencia en el campo de los vehículos eléctricos. Y, como aseguró Elon Musk en los conocidos planes maestros, ha ido creando vehículos cada vez más asequibles y de mayor volumen de producción. Sin embargo, para culminar su misión, es imprescindible ir un paso más allá.
En la actualidad, el Tesla Model 3 se comercializa en España por casi 40.000 euros. Una cifra que cae por debajo de los 35.000 euros con las diversas ayudas gubernamentales (Plan MOVES III, desgravación en la declaración de la renta, etc.). Si se considera su relación precio-prestaciones y se compara con la del resto de modelos del mercado, el coche de Tesla es, ciertamente, una propuesta bastante interesante. Pero, a pesar de ello, sigue siendo un vehículo inalcanzable para muchos.
Para llegar por completo a las masas, Tesla necesita un modelo que vaya un poco más allá. Sobre todo si se tiene en cuenta el gran crecimiento y los ambiciosos planes expansivos de las marcas chinas, que poco a poco están desembarcando en regiones como Europa con coches muy completos y, en algunos casos, a precios bastante asequibles –como el MG4–.
Es en ese escenario en el que entraría el coche barato de Tesla, también conocido como Model 2. No obstante, las informaciones relacionadas con este han sido diversas y, en algunos casos, incluso contradictorias. Afortunadamente, tras la última llamada con los inversores de Tesla, parece que todo empieza a aclararse.
Pero, ¿el coche barato de Tesla –o Model 2– no se había cancelado?
Antes de abordar la información más reciente, retrocedamos nos meses atrás. A finales de 2023, la biografía escrita por Walter Isaacson sobre Elon Musk confirmó que la compañía proyectaba dos nuevos vehículos: un robotaxi autónomo y otro de bajo coste pero gran volumen de producción. Ambos estarían construidos en una nueva plataforma.
En enero de 2024, durante la habitual llamada con inversores posterior a la presentación de los resultados trimestrales, Elon Musk aseguró que, efectivamente, la empresa trabajaba en un modelo completamente nuevo y reveló varios detalles del mismo. Su producción comenzaría durante la segunda mitad de 2025 en la fábrica que tienen en Texas (Nevada), aunque, en el futuro, también se llevaría a cabo en la gigafactoría prevista para México, así como en una tercera ubicación fuera de América del Norte todavía por determinar.
En abril, sin embargo, tanto Reuters como Electrek, dos medios consolidados en el sector, indicaron que Tesla había cancelado, según fuentes cercanas, el desarrollo del citado coche eléctrico barato –o Tesla Model 2–.
Reuters, en concreto, mencionaba de manera anónima a varios empleados de Tesla en su artículo. Estos afirmaron que la nueva directriz era poner el foco en el robotaxi autónomo y cancelar el vehículo barato también conocido como Model 2. Una información que Musk no tardó en desmentir minutos más tarde a través de su perfil en X (Twitter). Poco después, además, el magnate anunció que la presentación del robotaxi sería el próximo 8 de agosto.
Días más tarde, Electrek corroboró la información publicada por Reuters. Según las fuentes consultadas por el citado medio, Tesla había cancelado cualquier trabajo relacionado con el proyecto e incluso abortó la expansión de la gigafactoría de Nevada, establecida a finales de 2023 como una prioridad para este año. Esta era necesaria para llevar a cabo la producción del esperado coche eléctrico barato de Tesla, que usaría una nueva plataforma.
En paralelo, Musk estableció la expansión sur de la citada gigafactoría como la nueva prioridad. En ella se albergará un centro de datos gigante que dará vida al robotaxi de la compañía. Un proyecto que, según Electrek, ya acumula retraso.
Tales informaciones no fueron bienvenidas por los inversores, que consideran el lanzamiento de un modelo más económico como vital para el crecimiento de Tesla a largo plazo. Especialmente, considerando el auge de las compañías chinas en este sector.
¿Qué dijeron en la llamada con los inversores?
En la última llamada con inversores, dada la presión existente, la compañía arrojó algo de luz al respecto. Y, en cierto modo, confirmó las informaciones publicadas tanto por Reuters como por Electrek. Esto es lo que dijo en la última diapositiva de su presentación:
Hemos actualizado nuestra futura gama de vehículos para acelerar el lanzamiento de nuevos modelos antes del inicio de producción previamente comunicado en la segunda mitad de 2025.
Estos nuevos vehículos, incluidos modelos más asequibles, utilizarán aspectos de la plataforma de próxima generación, así como aspectos de nuestras plataformas actuales, y podrán producirse en las mismas líneas de fabricación que nuestra línea de vehículos actual.
Esta actualización puede dar como resultado una reducción de costes menor de lo esperado anteriormente, pero nos permite aumentar nuestros volúmenes de vehículos de una manera más eficiente en términos de gasto de capital durante tiempos de incertidumbre. Esto nos ayudaría a utilizar plenamente nuestra capacidad máxima actual de cerca de tres millones de vehículos, lo que permitiría un crecimiento de más del 50 % con respecto a la producción de 2023 antes de invertir en nuevas líneas de fabricación.
Nuestro producto robotaxi especialmente diseñado seguirá aplicando una revolucionaria estrategia de fabricación "unboxed".
Presentación de Tesla para inversores
Tesla, por lo tanto, sí lanzará modelos más baratos que los actuales, pero no de la forma en la que se esperaba. El plan original consistía en crear una plataforma completamente nueva e implementarla en varias gigafactorías. Esta, mediante múltiples innovaciones, haría posible reducir el coste de producción y lanzar vehículos más asequibles. Eso sí: abordar tal labor requiere de una fuerte inversión tanto económica como de tiempo.
Habrá un Tesla más barato, sí, pero no como esperábamos
Ante tal situación, Tesla ha optado por implementar varias de las mejoras ideadas para la nueva plataforma en las líneas de producción actuales. Esto, como bien explican, no les permitirá reducir los costes tanto como originalmente se preveyó, por lo que la franja de los 25.000 dólares que se proyectó para el Tesla Model 2 parece, de momento, imposible.
Sin embargo, sí sería sensato esperar que alguno de los nuevos vehículos se sitúe entre los 30.000 y los 35.000 dólares antes de ayudas gubernamentales. El Model 3 actual, por fijar un punto de referencia, parte de unos 39.000 dólares en EE.UU.
Este planteamiento, no obstante, deja dos grandes cuestiones en el aire:
- ¿Serán estos modelos versiones renovadas de los Model 3 y Model Y actuales, variantes adicionales de los mismos o líneas de producto nuevas? Dicho de otro modo ¿llegará al mercado una especie de Model 3 Lite, simplemente se actualizará el Model 3 actual con un precio inferior fruto de las citadas mejoras o veremos un Model 2?
- Y, en relación con esto: ¿en qué aspectos se notará el menor coste de producción? ¿Baterías más económicas? ¿Motores menos potentes? ¿Procesos de producción más eficientes?
Por el momento, lo único que se ha dado a conocer es que la intención de la compañía es iniciar la producción de los nuevos modelos a finales de 2024 o inicios de 2025. Un año antes y con menos inversión que el plan originalmente trazado.